Había pensado en omitir a Jim Lee de esta lista de algunos de los mejores dibujantes, esperando que alguien más lo mencionara, pues es una gran influencia para todos los que colaboramos en este blog; sin embargo, no pude, jaja. Simplemente, sin los comics de Jim Lee, mi gusto por el medio no sería el mismo. El surcoreano debutó haciendo las tintas para este comic, en 1986:
Despúes de terminar la carrera de Psicología, se dedicó a buscar chamba en alguna de las editoriales más importantes, hasta que se topó con Carl Potts, quien le ayudó a conseguir trabajo como artista emergente en Marvel Comics. Debutó como dibujante regular en Alpha Flight; además de hacer algunos trabajos como en Solo Avengers # 1, Marvel Comics Presents # 33, Classic X-Men # 39, y otros.
También lanzó el título de Punisher War Journal, durante poco más de un año, para ser reasignado al título que le daría gran fama.
Uncanny X-Men, en el que hizo el número 248, supliendo a otro grande, Marc Silvestri, dentro del crossover Acts of Vengeance, en del mismo título para, finalmente, tomar la estafeta de dibujante regular, con el número 267. Pese a que permaneció poco tiempo, tuvo una de las corridas más memorables, co-creando personajes importantes, como Gambit y Bishop.
En 1991, Chris Claremont y Jim Lee fueron asignados con una nueva tarea: crear, después de 30 años de haber debutado, un segundo título de X-Men. Este rompió todos los records y probablemente sea de los comics más vistos y conocidos en el mundo:
También hizo una serie de 105 tarjetas de X-Men para Skybox y Marvel:
Jim Lee también es de los dibujantes y socios fundadores de Image Comics, una compañía a la que la gente le daba seis meses de vida, dado a que no era común la creación de nuevas editoriales.
En su nueva empresa, Lee creo, además de su grupo principal, Wild C.A.T.S., otros personajes como Gen 13, Deathblow y Divine Right, título en el que debutaba como argumentista, pero que no tuvo buen recibimiento.
En 1996, Marvel Comics, en un intento por recuperarse de sus crecientes problemas económicos, lo invitó, junto con Rob Liefeld, para relanzar algunos de sus títulos más importantes: Fantastic Four y Iron Man (ayudado en este último, por los trazos de Whilce Portacio). El plan duró poco tiempo, pues la editorial entró a la inminente bancarrota y cambió los planes contractuales, por lo que Lee y los demás creadores, decidieron abandonar sus títulos. Por cierto, aunque sólo dibujó 6 números de Fantastic Four (y coescribió 13), son de mis favoritos.
En un gran movimiento, Jim Lee vendió por una suma millonaria, sus creaciones y estudio a DC Comics, a cambio de formar parte de la dirección de la compañía. Aunque su trabajo creativo ha disminuido con los años, también ha participado en varios proyectos importantes para DC, como Batman, con Jeph Loeb:
Otros trabajos importantes, han sido el fallido título All-Star Batman and Robin, con Frank Miller; así como toda la reestructuración de la compañía DC del año pasado, con The New 52 y tuvo la tarea de ilustrar el título principal: Justice Leauge, al lado del guionista (y también directivo) Geoff Johns.
Jim Lee ya ha abandonado Justice League, para dedicarse a un nuevo y misterioso proyecto; algunos dicen que podría tratarse de una nueva versión de Wildcats; o bien, el dibujo del mega x-over del próximo año; sin embargo, aún no sueltan prenda.
2 comments:
No hay adjetivo alguno que no haya utilizado antes para describir lo mucho que me gusta el trabajo del Jim. Supongo que es normal que compartamos la admiración por su arte ya que nuestro gusto por los comics alcanzó un punto crítico justamente cuando él estaba rompiendo paradigmas en la industria. Como es normal en cualquier curva del desempeño, Jim Lee ha tenido malos momentos, pero sus ratos de inspiración han hecho historia en el medio. Autor indispensable en el contenido de este humilde blog.
Desde que colecciono de una manera formal comics en inglés, el trabajo de Jim Lee ha estado muy presente a través de los años, en sus distintas formas de evolución y siempre me ha parecido espectacular. Nunca he podido disimular la emoción que me causa disfrutar de todo lo que dibuja (viejo o nuevo), es uno de los pocos lujos que todavía puedo darme. POR SUPUESTO espero con ansia su próximo proyecto.
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